Calor
De este calor que no soportas me acordaré una tarde de invierno, cuando te hayas congelado en la línea 20 de la EMT.
Cuídate de no despreciar nada: la basura y la mierda nos libran de palomas, gaviotas y otros seres repugnantes poetizados por inercia.
Mírame con visión de futuro y estrategia empresarial. Mi actitud pegajosa y el sol de las quince-cerocero te harán falta en unos meses.
Sólo quería recordarte que todo en la vida es útil. Por ejemplo, estos cuarenta abrazos centígrados.
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